domingo, 18 de noviembre de 2018

El maltrato infantil en los hogares españoles en aumento

MARÍA SIERRA, 20.09.2018
COMIENZO la mañana como cada día leyendo EL CORREO GALLEGO y veo que se celebra en la A. P.  de Ourense el juicio contra un padre -si así se le puede llamar- acusado de maltratar durante años a sus 2 hijos, para el que el fiscal además de la privación de la patria potestad y otras penas accesorias pide 10 años de prisión. La noticia me lleva a escribir sobre el maltrato infantil que en España no constituye un delito específicamente tipificado en el Código Penal si no simplemente un agravante de otros delitos cuando la víctima es un niño u otra persona especialmente vulnerable.
Aunque las cifras son poco fiables y todo parece indicar que únicamente es visible la punta del iceberg, en nuestro país podría haber más de 180.000 niños de entre 6 y 11 años y 150.000 pre-adolescentes que en lugar de criarse entre el amor, la ternura, la preocupación y la protección de sus padres, estos les pegan con frecuencia, un fenómeno muy grave sometido al tabú de la privacidad que nace del convencimiento social de que "los hijos son de sus padres y les pertenecen". 

Los niños maltratados los son de todas las clases sociales y la situación no puede identificarse con un determinado perfil de familia ni desde el punto de vista económico, ni del nivel de formación, ni de la ideología ni de cualquiera otra característica concreta que la defina.
El problema se acentúa más aún si pensamos en que otros grupos sociales de víctimas de distintos delitos -sirva como ejemplo las mujeres maltratadas- se asocian entre sí y luchan por sus derechos mientras que los niños que sufren malos tratos en su hogar no tienen voz y se ven obligados a hablar a través de los adultos que en demasiadas ocasiones y aun sabiendo que a nuestro alrededor puede haber niños que sufren maltrato miramos para otro lado pensando que no somos nosotros quienes debemos de inmiscuirnos en la intimidad de otra familia de ahí que mi artículo hoy vaya por y para todos ellos.
Tolerancia cero para el maltrato físico y psíquico hacia los niños. 
Tlfno. 900 20 20 10 ANAR de ayuda a los niños y los adolescentes.
www.asociacionanxinos.com

Castilla-León: Aumenta el maltrato infantil

1 de cada 10 niños amparados por la Junta en 2018 sufrió maltrato físico por parte de sus padres.
Aumenta también el nº de menores protegidos por haber sufrido maltrato psíquico; 9,51 frente al 5,99% de los casos del 1º semestre de 2017.
M. J. PASCUAL, Valladolid, 30 agosto 2018
Los datos comparativos de los 1ºs semestres de 2018 y 2017 sobre la actividad del Servicio de Protección de Menores de la Junta revelan un incremento del 9,51% de los casos en que los niños han sufrido maltrato físico, frente al 8,76%, es decir, casi 1 de cada 10 casos en los que la Junta toma medidas es por lesiones. En mayor medida ha aumentado el nº de menores protegidos por haber sufrido maltrato psíquico (9,51 frente al 5,99% de los casos del 1º semestre de 2017), si bien la negligencia de los progenitores en la crianza de los hijos, tanto física como psíquica, suele ser la causa más extendida, con valores que están entre el 30 y el 22%.
Un año después del crimen de la niña Sara F. M., la pequeña vallisoletana de 4 años que murió el 3 de agosto de 2017 como consecuencia de los golpes y después de sufrir posibles abusos sexuales, el nº de expedientes de protección abiertos por la Junta sobre menores víctimas de maltrato o abandono van en aumento y, aunque tímidamente, los familiares y personas del entorno de los pequeños en situación de abandono empiezan a denunciar más, aunque siguen siendo los servicios sociales de ayuntamientos y diputaciones los mayores detectores de esta violencia contra los más pequeños. 

El 'efecto Sara', que llevó a la consejera de Familia Alicia García a comparecer en las Cortes para anunciar el refuerzo de las medidas de protección a la infancia y la revisión de la coordinación entre administraciones, ha supuesto, en el 1º semestre del año 2018, la apertura de un 30% más de expedientes respecto del mismo periodo del año anterior, antes del asesinato de la pequeña Sara.
Desde la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades, aunque se resisten a reconocer la relación causa-efecto e indican al respecto que tiene que pasar más tiempo para que se asienten las estadísticas, sí consideran que el refuerzo de las campañas de sensibilización y «sobre todo, de contarle a la gente qué pasos hay que dar para denunciar estos casos, así como de facilitar las vías de denuncia» están empezando a dar resultados. En lo que va de 2018 son 214 los expedientes de protección, respecto de los 148 tramitados en el mismo período del año anterior. También se han completado 153 tutelas por situaciones de desamparo y desatención afectiva, frente a las 122 contabilizadas en el primer semestre de 2017.
En la actualidad, 1.649 niños de Castilla y León están 'monitorizados' por la Junta, que tiene abiertos expedientes de protección sobre sus condiciones de vida y son 1.348 menores los que, directamente, han pasado a ser tutelados por la Administración autonómica, al considerar los equipos técnicos que los niños sufren desamparo y que sus progenitores no les atienden adecuadamente. En otros 300 casos, se han impuesto medidas para proteger a los pequeños. 
Son 59 expedientes de protección más en 2018 respecto de los 1ºs 6 meses del año anterior. Y durante todo 2017, la Junta abrió 1.959 expedientes, tuteló a 1.488 niños y acordó 471 medidas.
Es llamativo, también respecto del 1º semestre del año pasado, que los casos de abusos sexuales hayan aumentado 2 puntos, al pasar del 0,61% al 2,9%. Ocurre igual con los casos en los que los padres inducen a los menores a delinquir, aunque, aclaran desde Familia, «se trata de porcentajes muy bajos que, en cuanto ocurre un caso más, se dispara la estadística».
Siguen siendo los CEAS de ayuntamientos y diputaciones y las fuerzas y cuerpos de seguridad quienes más alertan de situaciones de abuso, violencia o abandono infantil, (41,12 y 12,15%), aunque va en aumento la implicación de los profesionales del sector sanitario (12,62%), de la Fiscalía (7,48%) y los familiares, que han pasado de ser solo el 2,44% en los 6 meses previos al caso Sara al 7,01% que recoge la última estadística. La colaboración siendo escasa en los colegios.
El director de Familia, Pablo González, señala que el trabajo de formación que se está haciendo desde la Junta, «y que comienza a reflejarse en el aumento de las denuncias», está incidiendo en la coordinación, la sensibilización de los colegios profesionales, la universidad y en que la ciudadanía, en general, «sepa cómo actuar cuando tienen conocimiento del maltrato infantil. Y creo que eso lo estamos consiguiendo». La Junta pretende incorporar también este año a las guarderías y campamentos a la cruzada contra el maltrato infantil.

Aprobación de una ley para erradicar la violencia contra la infancia

“España no puede perder tiempo para la aprobación de una ley para erradicar la violencia contra la infancia”. Marta Santos Pais, representante especial del Secretario General de Naciones Unidas, insta el Congreso a aprobar la norma antes de finales de año.
TIZIANA TROTTA, El Pais, Madrid 6 NOV 2018
Para un niño un día de violencia es una eternidad. Marta Santos Pais, representante especial del Secretario General de Naciones Unidas sobre Violencia contra la Infancia, lo repite con frecuencia para explicar por qué es tan importante que España apruebe el proyecto de ley para la protección de los menores antes de finales de año y que entre a las Cortes a principios de 2019.
Durante su visita a Madrid la semana pasada, invitada por la Alianza para erradicar la violencia contra la infancia, la diplomática portuguesa pidió a los grupos políticos que se mantenga la unidad en torno al proyecto normativo. 
“La ley tiene que reflejar el compromiso del Estado, no el de una administración, porque la violencia contra la infancia es un asunto de derechos humanos, no ideológico”, subrayó en la sede de Unicef Comité Español
“España no puede perder tiempo para la aprobación. Tiene la capacidad de hacer un buen trabajo y convertirse en referente para muchos otros países”.
En España, cada día 37 niños son víctimas de maltrato en el ámbito familiar: más de 13.800 menores al año, según la última estadística del Registro unificado de casos de sospecha de maltrato infantil. En 2017, se interpusieron más de 38.000 denuncias por delitos violentos contra menores de edad, según el Ministerio del Interior. De estos, 4.875 por malos tratos en el ámbito familiar y 4.211 por abuso sexual —aunque se estima que solo un 15% de los casos son denunciados y, de los que entran en el sistema, el 70% nunca llega a juicio oral.
A pesar de estas cifras desalentadoras, Santos Pais confía en que el Gobierno de Pedro Sánchez apoyará el proyecto de ley en los plazos fijados. La representante especial de Naciones Unidas se alegra de que España ponga la infancia "en el centro de la agenda política" y valora la creación de los altos comisionados para la lucha contra la pobreza infantil y para la Agenda 2030. “La pobreza infantil es extremadamente visible en España. El impacto negativo y desafiador de los años de la austeridad que hemos experimentado en muchos países europeos ha tenido un impacto muy negativo en la infancia y en la adolescencia. No siempre se ha medido, pero la disminución de presupuesto disponible para los más jóvenes ha causado un recorte en el número de profesionales ocupándose de ellos y de los recursos destinados a la protección”, señala. “Muchas familias se han encontrado así con un estrés adicional y sin el apoyo de las instituciones”. Algo que hay que cambiar con urgencia, destaca.
Santos Pais sabe que una ley por sí sola no será suficiente para acabar con la violencia contra la infancia. “Se necesita el respaldo de un presupuesto y hay que ofrecer herramientas a los actores para detectar las situaciones de violencia, para denunciar, proteger a los menores, etcétera”, explica.
Sin embargo, no todas son malas noticias. “Hay temas en los que se ha avanzado mucho a escala internacional en los últimos años. Uno es la adopción de la Agenda de Desarrollo Sostenible, que reconoce a los niños como agentes de cambio y que se ha traducido en la adopción de reformas legislativas concretas. Hace 10 años apenas 16 países contaban con leyes que prohíben todas las formas de violencia contra la infancia, hoy en día son 58, más del triple”.
Muchos países, agrega la experta, están desarrollando encuestas comprensivas para entender el verdadero alcance del fenómeno. “Estos datos desglosados nos están ayudando para diseñar medidas eficaces. Muchos niños no comparten su historia por el miedo a sufrir represalias. Nuestro objetivo es que se sientan listos para contarla, que sepan que pueden beneficiarse de servicios de apoyo médico y psicológico, que hay juzgados especializados listos para actuar”.
¿Pero estamos listos para escuchar la voz de las víctimas? 
“Esta tiene que ser la 1ª medida y es algo que depende de cada uno de nosotros. No necesitamos una estrategia formal adoptada por un Estado para manifestar nuestro compromiso y apoyar a los niños que sufren”, dice Santos Pais. 
La capacitación de profesionales que trabajen con y para la infancia, agrega, es una tarea importante, pero aún más crucial es que los niños se sientan seguros para hablar. “En muchas ocasiones, las víctimas de violencia se quejan de que no fueron escuchadas, sino que se sintieron bajo juicio. Y si hablamos de niños, la culpabilización por parte de las autoridades es aún más fácil. Muchas veces son completamente ignorados, no se investiga, no hay asunción de responsabilidad, no se castiga a los responsables. Todo esto ayuda a la cultura de silencio y de impunidad y a perpetuar situaciones de violencia”.
A pesar de los progresos, admite Santos Pais, los cambios no son tan rápidos como le gustaría. “Tenemos que acelerar nuestra acción. Y solamente uniendo esfuerzos entre los distintos departamentos del Estado, las comunidades autónomas, los actores de la sociedad civil, los propios niños y empoderando a las familias, a los profesionales y las instituciones podemos alcanzar nuestro objetivo”.
¿CÓMO SERÁ LA LEY?
La Alianza para erradicar la violencia contra la infancia —una plataforma internacional creada en 2015 a la que España se sumó el pasado mes de abril con una red formada por Aldeas Infantiles, SOS, Educa, Plan International, Save the Children, Unicef y World Vision— pide que la nueva ley ofrezca protección en todos los ámbitos en los que se mueve un menor.
En particular, reclama campañas de prevención y sensibilización; formación de profesionales; educación afectivo-sexual reglada en las escuelas desde edades tempranas; un sistema de recogida de datos adecuados y la creación de juzgados y fiscalía especializados en materia

El maltrato infantil puede generar problemas de autoestima o inseguridad en los niños

Eco TV, Panamá,14.11.2018.
La abogada especialista en Derecho de Familia, Maruja Bravo habló este miércoles 14 de noviembre en Eco 360, del maltrato infantil y las afectaciones que causan en los niños y niñas.
Dijo que un menor de edad al ser agredido de forma física, psicológica y verbalmente puede llegar a tener problemas de autoestima e inseguridad.
Además, Bravo se refirió a la situación que trae el abandono de un menor. "Cuando tu descuidas las necesidades del menor, esto le produce daño en los niños, eso es una situación de conducta omisiva".
Entre enero y octubre de 2018 se presentaron un total de 2,366 denuncias de maltrato a menores. En 4 años 10.405 casos de denuncias de maltrato contra niños, niñas y adolescentes fueron registradas en el país.