La pareja tiene otra hija que no estaba en la casa
Mata a su mujer y su hijo de cuatro años en Almería y luego se arroja por una ventana.
Los vecinos oyeron sobre las 8.30 a la mujer gritar '¡que me matan a mi hijo'
'El hombre no hablaba, emitía bufidos, como si estuviera fuera de sí'
El matrimonio trabajaba en un centro comercial, ella cajera y él de vigilante
El agresor intentó acabar con su vida pero al final sólo se fracturó un brazo
Un hombre ha acabado esta mañana en Almería con la vida de su mujer y su hijo de 4 años y luego se ha arrojado al vacío por una ventana de la vivienda.
La Policía Nacional ha encontrado los cuerpos sin vida y con heridas de arma blanca de la mujer, de 36 años, y su hijo de 4 años y ha detenido al marido, que se había tirado por la ventana tras matar a su mujer y su hijo.
Según los vecinos, para intentar huir, pues había cogido unos cables.
Los hechos han ocurrido en un 2º piso del nº 3 de la plaza Pi y Margall de la localidad, cerca de la plaza de toros, a 1ª hora de este viernes.
La pareja tiene otra hija, Irene, de unos 15 ó 16 años, que en ese momento se había marchado al instituto donde estudia. El pequeño se llamaba Cristóbal.
Una vecina del 3º piso, Ascensión Maldonado, oyó cómo la mujer, de nombre Mercedes, gritaba entre las 8.30 y las 8.45 horas de la mañana "¡que me mata a mi hijo!, ¡que me mata a mi hijo!".
Según esta vecina, el marido no hablaba, "sólo emitía bufidos, como si estuviera fuera de sí". Poco después, el marido se arrojaba desde una ventana del 2º piso hacia la calle, sólo con los calzoncillos puestos.
Alba, que es hija de la vecina y amiga de la hija del matrimonio, también escuchó desde su habitación los gritos.
Se asomó a la ventana y vio, a través del patio interior, la lavadora del piso del matrimonio cubierta de sangre y a la víctima también cubierta de sangre.
Ella y su padre corrieron hacia la puerta de la casa del matrimonio y empezaron a tocar, e incluso intentaron echarla abajo.
En ese momento, el agresor se arrojó por la ventana, siempre según dicha versión.
El hombre, de nombre Cristóbal, se levantó por su propio pie, con su cuerpo lleno de la sangre de sus víctimas.
La Policía, alertada por los vecinos, lo detuvo de inmediato y en estos momentos se encuentra ingresado en el hospital Torrecárdenas, donde lo atienden de sus heridas.
En principio, parece que sólo tiene fracturado un brazo.
El hombre y la mujer trabajaban juntos en un centro comercial de Almería, ella de cajera y él como vigilante de seguridad. Ambos son de nacionalidad española.
No llevaban mucho tiempo viviendo en el barrio.
Según Ascensión Maldonado, Mercedes nunca le había dicho que tuviera problemas, e incluso dijo que Cristóbal "ni siquiera bebía alcohol".
El juzgado de Instrucción nº 1 de Almería se ha hecho cargo de la investigación.
La Subdelegación del Gobierno en Almería asegura que no constan antecedentes de violencia machista en el seno de la familia y tampoco se tiene conocimiento de que el matrimonio pasara por alguna situación difícil.
Decenas de personas se han congregado desde el momento de los hechos en torno al domicilio, donde vivía la pareja desde hace unos "cinco o seis años", según un vecino.
En el momento en que ha salido el cuerpo del pequeño han estallado en aplausos, llantos y gritos de "asesino, asesino".
Se han convocado varias concentraciones de repulsa por el crimen esta misma mañana en Almería, entre ellas una a las puertas del Ayuntamiento.
Éste es el 2º caso de violencia doméstica registrado en Andalucía esta semana.
El lunes pasado moría una mujer de 41 años en la localidad sevillana de Pruna, apuñalada alevosamente por su marido, que después se entregó a la Guardia Civil.
La Policía Nacional ha encontrado los cuerpos sin vida y con heridas de arma blanca de la mujer, de 36 años, y su hijo de 4 años y ha detenido al marido, que se había tirado por la ventana tras matar a su mujer y su hijo.
Según los vecinos, para intentar huir, pues había cogido unos cables.
Los hechos han ocurrido en un 2º piso del nº 3 de la plaza Pi y Margall de la localidad, cerca de la plaza de toros, a 1ª hora de este viernes.
La pareja tiene otra hija, Irene, de unos 15 ó 16 años, que en ese momento se había marchado al instituto donde estudia. El pequeño se llamaba Cristóbal.
Una vecina del 3º piso, Ascensión Maldonado, oyó cómo la mujer, de nombre Mercedes, gritaba entre las 8.30 y las 8.45 horas de la mañana "¡que me mata a mi hijo!, ¡que me mata a mi hijo!".
Según esta vecina, el marido no hablaba, "sólo emitía bufidos, como si estuviera fuera de sí". Poco después, el marido se arrojaba desde una ventana del 2º piso hacia la calle, sólo con los calzoncillos puestos.
Alba, que es hija de la vecina y amiga de la hija del matrimonio, también escuchó desde su habitación los gritos.
Se asomó a la ventana y vio, a través del patio interior, la lavadora del piso del matrimonio cubierta de sangre y a la víctima también cubierta de sangre.
Ella y su padre corrieron hacia la puerta de la casa del matrimonio y empezaron a tocar, e incluso intentaron echarla abajo.
En ese momento, el agresor se arrojó por la ventana, siempre según dicha versión.
El hombre, de nombre Cristóbal, se levantó por su propio pie, con su cuerpo lleno de la sangre de sus víctimas.
La Policía, alertada por los vecinos, lo detuvo de inmediato y en estos momentos se encuentra ingresado en el hospital Torrecárdenas, donde lo atienden de sus heridas.
En principio, parece que sólo tiene fracturado un brazo.
El hombre y la mujer trabajaban juntos en un centro comercial de Almería, ella de cajera y él como vigilante de seguridad. Ambos son de nacionalidad española.
No llevaban mucho tiempo viviendo en el barrio.
'Ni siquiera bebía'.
Otro joven vecino del edificio explica que el presunto asesino "parecía una buena persona". "Si era lo mejor del barrio, no sé cómo ha podido hacer esto".Según Ascensión Maldonado, Mercedes nunca le había dicho que tuviera problemas, e incluso dijo que Cristóbal "ni siquiera bebía alcohol".
El juzgado de Instrucción nº 1 de Almería se ha hecho cargo de la investigación.
La Subdelegación del Gobierno en Almería asegura que no constan antecedentes de violencia machista en el seno de la familia y tampoco se tiene conocimiento de que el matrimonio pasara por alguna situación difícil.
Decenas de personas se han congregado desde el momento de los hechos en torno al domicilio, donde vivía la pareja desde hace unos "cinco o seis años", según un vecino.
En el momento en que ha salido el cuerpo del pequeño han estallado en aplausos, llantos y gritos de "asesino, asesino".
Se han convocado varias concentraciones de repulsa por el crimen esta misma mañana en Almería, entre ellas una a las puertas del Ayuntamiento.
Éste es el 2º caso de violencia doméstica registrado en Andalucía esta semana.
El lunes pasado moría una mujer de 41 años en la localidad sevillana de Pruna, apuñalada alevosamente por su marido, que después se entregó a la Guardia Civil.
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